ACUARELAS, VUELTA A LO TARDICIONAL

La verdad es que aun y con la agilidad y rapidez con la que se trabaja con el ordenador, el descaro con el que nos atrevemos a experimentar con ilustraciones o motivos que de otra manera se nos harían impensables (al menos a mi), sienta muy bien reconciliarse de vez en cuando con los medios tradicionales. Y es que en verdad, el sistema de análisis y planificación del trabajo que exige la pintura tradicional es sin duda una herramienta didáctica fabulosa. El ordenador cierto es que da muchas ventajas, pero es por la lentitud del proceso de los medios tradicionales (y por no tener un CTRL+Z) por lo que, en mi opinión, hace asimilar mejor y más concienzudamente las lecciones. Es por ello que animo a todos los wacomeros (entre los que me incluyo) a abandonar de vez en cuando las tabletas para reconciliarse con los pinceles y los lápices.

Esta semana estoy echando un pulso con las acuarelas, que sabe dios los años que llevaba si usarlas :P.